El alero LeBron James volvió a ser el héroe salvador de los Cavaliers de Cleveland al anotar un estratosférico triple sobre la bocina que les dio el triunfo por 96-95 ante los Magic de Orlando en el segundo partido de las finales de la Conferencia Este.
Los Cavs, que pasaron por encima de Pistons y Hawks, se están dando de bruces ante los de Florida, y en dos igualadísimos partidos llevan la eliminatoria empatada, como bien podrían llevarla 0-2, aunque también 2-0.
Cuando los Cavaliers se encontraban ya en el abismo de perder el segundo partido consecutivo en su campo del Quicken Loans, después de que el alero turco Hedo Turkoglu con un segundo para el final anotara la canasta que les daba una ventaja parcial (93-95), James reivindicó su condición de Jugador Más Valioso (MVP) y dio vida a la serie.
Hedo Turkoglu, al igual que en el primer partido volvió a ejercer de mandamás en su equipo, y en el último minuto de partido puso a los Cavs en la picota. Primero con un triple a 48 segundos para empatar el partido a 93, y en el siguiente ataque de su equipo (después de unos pasos de LeBron), para anotar una canasta a 4 metros que le daba 2 de ventaja a Orlando (93-95), con sólo 1 segundo por jugar.
Un segundo que cambió todo. Orlando se veía ganador y volviendo a casa con un botín inesperado y Cleveland se veía como un gigante con pies de barro que claudicaba ante el primer rival de verdadera entidad con el que se ha encontrado.
Pero los MVP's no se regalan a cualquiera, y el que nace con estrella es por algo, y LeBron James, tras recibir el balón de saque de banda, cogió el balón a siete metros y medio, y con Turkoglu encima, se levantó (voló), para anotar el que de momento es el tiro más importante de su carrera.
Con empate a 1 la serie viaja a Florida, con unos Orlando Magic que puede agarrarse a la lectura positiva, es decir, que se han llevado un partido y que han tenido en la mano el otro, con lo que están luchando de igual a igual con Cleveland, o pueden venirse un poco abajo y ponerse a pensar en lo que podía haber sido y no fue.
Para Cavs, el llegar al 3º después de haberse visto con 2 derrotas seguidas en su Quicken Loans y haber salvado milagrosamente en 2º, puede ser una inyección de moral letal.
Por cierto, que al igual que el primer día, los Cavaliers comenzaron mandando con cómodas ventajas en la primera parte (30-16 el primer cuarto), pero al igual que en el partido 1, Orlando no se descompuso y fue recortando la ventaja hasta tener el partido ganado.
Los Magic, por culpa de la defensa rival no encontraron a Howard en ataque (8 tiros), y tuvieron ser sus valiosos aleros los que llevaran el peso de su equipo, mientras que en Cleveland, además del sempiterno James, destacó, casi por primera vez en todos los Play Offs el lituano Ilgauskas.
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